HF Ipanema Park

La librería más bella del mundo se encuentra en la calle Carmelitas, cerca de la Torre dos Clérigos. Destaca el edificio exterior, pero es en su interior donde Lello conquista a sus visitantes. El parqué compone las dos plantas, unidas por una escalera roja muy larga y ancha. Lello cuenta con más de 120 000 libros que convierten este espacio en un auténtico placer para todos los amantes de la lectura. Hay títulos para todos los gustos y en varios idiomas. Siendo una de las librerías más antiguas de Portugal, Lello está establecida en Oporto desde 1881. La empresa se remonta a la fundación de la Livraria Internacional de Ernesto Chardron en 1869 en la calle Clérigos.

La catedral de Oporto, ubicada en la cima de la colina de Pena Ventosa, tiene una base antigua, aunque ya no hay rastros de esa época. Tener un estilo romántico sufrió varios cambios a lo largo de los siglos, debido al crecimiento de la población, la decadencia avanzada o incluso a las influencias estéticas de cada época. Con planta de cruz latina, la catedral tiene una romántica fachada de granito. La entrada está marcada por dos pilares y por la escultura de Nossa Senhora da Assunção, Santa Patrona de Oporto. La Catedral pertenece al centro histórico de Oporto, un lugar clasificado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1996.

Lo que alguna vez albergó un mercado tradicional de productos frescos es hoy en día un lugar de moda para pasar el rato. El mercado de Bom Sucesso, ubicado en un edificio emblemático de la década de 1940, renovó su interior en 2013 para recibir este nuevo concepto de mercado, dirigido a una ciudad bulliciosa como Oporto. Con un ambiente cosmopolita, este lugar invita a relajarse y disfrutar de una experiencia gourmet, a cualquier hora del día. Incluye ahora un hotel, modernos puestos con bebidas y aperitivos y también puestos con productos orgánicos frescos, carnicería, pescadería, abarrotes; otras tiendas y restaurantes temáticos y música en vivo.

La Torre de los Clérigos, un monumento barroco, se ha convertido en uno de los símbolos más importantes de Oporto. Tiene seis pisos, 240 escalones y 76 metros. Diseñada por el arquitecto italiano Nicolau Nasoni, la construcción comenzó en 1754 y no finalizó hasta 1763. En ese momento, la torre era la más alta jamás construida en Portugal y también la más alta de Europa, superando a Notre-Dame y Saint-Sulpice en París. A medida que nos acercamos, el centro de Oporto es visible desde todas partes. Nombrado monumento nacional en 1910, era más que un campanario: también servía de faro para los navegantes, telégrafo, reloj de la ciudad de Oporto e incluso sirvió como punto estratégico para las batallas militares y políticas. Al ser la tarjeta de visita de Oporto, esta atracción es imprescindible, especialmente para aquellos que desean subir todos los escalones para disfrutar de la magnífica vista panorámica de la ciudad y el río.